-Un móvil viejo.
-Una ampolla de mercurio.
-Cables, estaño, soldador y herramienta básica (destornilladores pequñines, cúter etc...)
El primer paso consiste en abrir el móvil. Una vez tengamos la placa debemos fijarnos en el sistema de pulsadores. Éstos deben de ser como el de la imagen, es decir, con las pistas entrelazadas debajo de la tecla. Hay otros que llevan una burbujita de plástico que no nos van a servir para este propósito. En la tecla de llamada limaremos el centro de las pistas con cuidado y después la parte más delicada es soldar dos cables a los dos extremos de las pistas. Una vez hecho esto hay que comprobar con el tester que juntando los cables nos da cero de resistencia y separándolos nos da infinito o circuito abierto. Ahora hay que sacar los dos cables fuera del móvil, taladrando la carcasa con una broca fina. Yo he sacado los dos cables por dos sgujeritos y he eliminado dos teclas, la de llamada que es en la que hemos soldado y la de la agenda para dejar camino libre a los cables y que ya no necesitaremos para nada.
Seguimos cerrando el móvil y nos quedarán los dos cables por fuera. Ahora vamos a poner en los dos cables una ampolla de mercurio. Este elemento se puede conseguir en casas de alarmas y de electrónica especializadas.
El funcionamiento está claro, cuando movamos el móvil la gotita de mercurio cerrará circuito y será como pulsar la tecla de llamada. En este móvil y en la mayoría, al pulsar llamada se efectuá una llamada al último número marcado que queda registrado el la memoria del móvil, por tanto solamente tendremos metido ese número para que en el momento de que nos muevan la moto nos mande una llamada y nos ponga en alerta.
Una vez todo montado queda de esta guisa. De momento la ampolla está pillada con un cable provisional pero se puede dejar más curiosa con una abrazadera de plástico. La inclinación que le demos a la ampolla nos dará la sensibilidad de la alarma.
En el caso de nuestra moto el sitio perfecto es el colín. Yo lo voy a poner en una cajita de registro y atornillada con tornillo-tuerca al guardabarros trasero miradlo, es muy fácil, y el teléfono fijo a la cajita poniendo espuma dura recortada a medida pero esto ya cada uno se puede inventar su brico. También se puede alimentar el móvil con la batería pero yo de momento y por tema garantías y no andar tocando instalación de la moto, lo dejo con su batería y cuando se agote a recargar.
Siguiente paso: hacerse con una tarjeta prepago movistar (18 E)
Una vez todo montado cuando muevan la moto el artilugio nos llamará.
Y para completar el sistema nos metemos en la página de Movistar y nos damos de alta en el servicio "Localízame", que en caso de que lleguemos demasiado tarde y la hayan metido en una furgo los chorizos nos dará su posición aproximada mandandole mensajes. Hay que ser rápido o cuando lleguen a su guarida lo localizarán y anularán, claro.
El que quiera además poner una sirena tiene mogollón de kits de electrónica para hacerlo y que se la lleven chuflando.
Espero que halla sido ùtil.
